La noticia de que Estados Unidos podría pasar de ser el principal comprador de petróleo a nivel mundial a ser un exportador (vendedor) neto, genera expectativa y alertas en sectores productores de petróleo, entre ellos los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y por ende en Ecuador y Venezuela, sus socios.
Según un reporte semestral de la Agencia Internacional de Energía (AIE) la producción estadounidense de petróleo de esquisto (petróleo no convencional que se obtiene de rocas a través de una técnica de fracturación hidráulica) podría generar cambios en las relaciones de poder entre productores.
Esta producción irá creciendo a un ritmo de 3,9 millones de barriles diarios entre el 2012 y el 2018.
De acuerdo con Fernando Santos Alvite, exministro de Energía de Ecuador, en los últimos tres o cuatro años, la producción del petróleo de esquisto se ha constituido en una revolución de la industria petrolera, dentro de la cual EE.UU. ya utiliza la producción de petróleo y gas que resulta de esta nueva técnica aplicada.
La mayor producción trae como consecuencia que Estados Unidos deje de importar petróleo y gas de los países de la OPEP. Europa también ha reducido su consumo, por estar interesada en el desarrollo de energías alternativas (ver cuadro arriba).
Así, según Santos, los compradores tradicionales que eran los países industrializados bajan su perfil en el mercado internacional y los nuevos compradores como China e India, ganan protagonismo.
Según Santos, el problema de vender el petróleo a estos nuevos compradores, es que estos podrían condicionar la compra con nuevos modelos de negocio que incluyan la participación de sus empresas y otros productos en los países vendedores.
La experiencia de Ecuador con China en los últimos años sobre negocios petroleros está marcada por una serie de ventajas (premios, destinos, calidad) para China, comenta.
El analista económico, Walter Spurrier, por su parte, considera que ante este panorama, Ecuador desde ya no va a contar con una fuente fácil de ingresos, sobre todo porque no se espera que el precio del barril continúe subiendo.
Spurrier dice que el Gobierno deberá ser más cauto en el gasto público y aconseja que Ecuador se apresure a incorporar sus reservas petroleras tradicionales (conocidas y no conocidas) y evitar así que, si a futuro baja el precio, nos quedemos con crudo sin explotar.
Sin embargo, Augusto Tandazo, especialista en Derecho Económico Energético, consideró que no obstante la previsión del aumento de la oferta por parte de Estados Unidos, el precio del crudo se mantendrá. Sostiene que el precio es el resultado de acuerdos que mantienen los países industrializados, a los cuales no les conviene que este caiga.
Ubicación
Reservas. California, Dakota del Norte y Texas contendrían las mayores reservas de esquisto en EE.UU.
Impacto. El auge de este hidrocarburo está creando un “choque de oferta” que revoluciona el mercado energético y “se expande al mundo”, estimó la Agencia Internacional de Energía.
FUENTE: EL UNIVERSO
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