Este producto que se obtenido del café tostado, molido, tratado por métodos físicos y siendo el agua su disolvente principal, o llamado café instantáneo se hace por evaporación de un café preparado en forma tradicional, al que se le ha evaporado el agua. Luego se vende en polvo impalpable. Estas razones son las que ocasionan una tendencia para el consumo de productos de fácil y rápida preparación.
Según el Banco Central la Balanza Comercial enero-marzo el sector cafetero exportó $61,8 millones. La cifra superó en 16% a lo obtenido en 2012, cuando se vendieron $53,3 millones, de los que se exportaron 426 733 mil sacos de café industrializado, principalmente soluble.
Dando como resultado que las ventas al exterior de café soluble significan cercar de $12,5 millones anuales.
A lo que el Ecuador ha aprovechado esta demanda para concentrar su producción, convirtiéndose en el segundo Exportador de café de la región, siendo el primero Brasil.
Sin embargo, la producción de más de 300 mil hectáreas que se da en el país no es suficiente para satisfacer la demanda interna. Ecuador necesita un millón de sacos de 60 kilos, pero se producen alrededor de 600 mil.
A demás de que no existen rutas aéreas ni marítimas a bajo costo que brinden beneficio económico. A diferencia de países como Rusia, India y Vietnam que tienen ventaja para llegar a esos mercados debido a la corta distancia.
Conclusión
La demanda de café soluble en el mundo se ha incrementado en 50%. Provocando un crecimiento de la industria de un 20% en los últimos 10 años, según la Organización Internacional del Café. Pero Ecuador aun necesita cambiar varias cosas como; es necesario maquinizar los procesos para mejorar la calidad, disminuir los costos de producción y abrir nuevos mercados y además es preciso crear apoyo logístico, tecnológico y productivo para que el sector mantenga su crecimiento a largo plazo.
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