Colombia toma correctivos necesarios para mejorar la política exportadora y generar verdadero crecimiento económico para este año. A través de los últimos años con los altibajos que ha presentado el país en su economía se proyecta nuevos campos de diversificar producción de exportaciones no minero-energéticas en el mercado para establecer de manera sostenida en el tiempo la economía de Colombia.
A pesar de las problemáticas del 2016 espera que el gobierno se ocupe ahora de las soluciones estructurales y de largo plazo para estabilidad nacional sin embargo, el escenario sigue siendo complejo y aún dista mucho del de los años del boom minero energético, por lo que Colombia no tiene otra alternativa que diversificar su aparato productivo y exportaciones para encontrar nuevas fuentes de crecimiento y de generación de empleo menos volátiles.
Es de gran consideración promover las exportaciones no minero-energéticas del país ya que este año se prevé una importante desaceleración en la demanda interna de productos y servicios como consecuencia de la caída en el poder adquisitivo de los colombianos. A pesar de la caída del salario real en el 2016 con una inflación de 5,75% y porque el salario mínimo apenas mantuvo un aumento poco visible incluyendo el impacto que tendrá el aumento de los impuestos para este año. Estudios recientes como el de la Universidad de la Sabana ya estiman la desaceleración mencionada en un 5%, en consideración Colombia se encuentra ante un contexto en el que el precio del dólar seguirá por el orden de los $3.000 donde dependerá todo de cómo evolucione la política económica norteamericana.
Como resultado se debe tomar en cuenta alternativas positivas y negativas en la política exportadora para tomar decisiones necesarias para que el sector no minero-energético se convierta en una verdadera opción de crecimiento económico y de generación de empleo acompañado de diversificación, potencialización de su oferta exportable de bienes y servicios como opción para recuperar las tasas de crecimiento de indicadores socioeconómicos.
En cuanto a la relación con el Ecuador se podría rescatar la unión como países vecinos para dar flote a esta nueva alternativa que a largo plazo puede generar estabilidad económica, no solo porque en Colombia se vienes años duros de sostenibilidad en todo ámbito sino también en nuestro país. Se debe evaluar profundamente campos que ayuden a respaldar el proyecto para que dé frutos.
AUTOR: EVELYN CRUZ
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